En ELI lo hemos repetido una y otra vez, siempre que tenemos ocasión: aprender inglés no es solo memorizar palabras o aprobar un examen. Es un proceso que va más allá del aula, que conecta con la vida diaria, con el modo de relacionarnos, con la curiosidad natural que tienen niñas y niños por descubrir y aprender. Y si hay algo que puede multiplicar el impacto de ese aprendizaje, es la implicación de las familias.
La clave está en sumar, no en supervisar
A veces pensamos que acompañar en el aprendizaje significa revisar deberes, insistir en que se estudie o incluso castigar si no se consiguen los resultados esperados. Pero va mucho más allá. Se trata de crear un entorno donde el idioma se viva, donde el inglés forme parte de la rutina sin necesidad de que parezca una obligación.
Porque no se trata de convertirse en profesores en casa (¡ni falta que hace!), sino de demostrar que te importa lo que está aprendiendo tu hija o tu hijo, de disfrutar juntos del idioma como un medio para conectar, compartir y pasarlo bien.
El papel de las familias en el aprendizaje de idiomas
Está más que demostrado: cuando la familia se involucra, avanzan más rápido, sienten más motivación y enfrentan con más confianza los retos del aprendizaje. ¿Por qué? Porque el apoyo emocional cuenta, y mucho.
Un simple “qué bien pronuncias esa palabra” o “enséñame esa canción nueva que aprendiste” puede ser más potente que cualquier sesión extra de gramática. Además, compartir ese tipo de momentos genera vínculos positivos con el aprendizaje. El inglés deja de ser “lo que tengo que estudiar” para convertirse en algo vivo, divertido y familiar.
¿Y si aprendemos en familia?
Aquí es donde entra en escena algo que en ELI pusimos en marcha hace unos meses: ELI Family. Una iniciativa pensada precisamente para eso, para que aprender inglés sea una experiencia compartida.
Con ELI Family proponemos un enfoque diferente: actividades que pueden hacerse en casa, sin presión, sin necesidad de tener un nivel alto, sin horarios fijos. Solo ganas de participar. Desde juegos hasta canciones, pasando por cuentos, recetas o adivinanzas. Recursos pensados para reforzar lo aprendido en clase… ¡sin que ni lo notéis!
Lo bonito de esta propuesta es que convierte a la familia en un equipo. Todas las personas aportan, todas aprenden, y lo mejor: se divierten.
Cómo funciona ELI Family
Cada mes, desde nuestras academias ELI, compartimos una serie de ideas y propuestas adaptadas a la edad del alumnado. Pequeñas acciones cotidianas que ayudan a integrar el inglés en el día a día de casa. Algunas ideas que proponemos:
- Cantar canciones en inglés en el coche o mientras cocináis.
- Ver juntos un episodio de una serie con subtítulos.
- Jugar a juegos como “I spy with my little eye” o el clásico “Simon says”.
- Inventar cuentos o finales alternativos para historias conocidas.
- Hacer manualidades siguiendo instrucciones en inglés.
Además, ofrecemos pequeñas guías para que madres, padres o tutores puedan entender qué se está trabajando en clase, y cómo pueden acompañar desde casa sin frustraciones ni exigencias. Todo de forma sencilla, práctica y natural.
¿Y si no sé inglés? ¿También puedo participar?
¡Por supuesto que sí! De hecho, muchas veces las mejores experiencias se dan cuando aprendéis juntas o juntos. No hace falta tener un inglés perfecto para decir “Let’s play!” o “What colour is this?”. Ni para preguntar “What did you learn today?” o “Can you teach me that word?”.
Es más, mostrar que tú también estás aprendiendo es una lección poderosa. Enseña que equivocarse no es malo, que aprender es un camino continuo y que el esfuerzo vale la pena. Y eso es un ejemplo brutal para esas edades tempranas.
Aprender en familia crea recuerdos que duran
¿Recuerdas cuando alguien de tu familia te ayudó a estudiar algo de forma divertida? Es probable que lo hayas guardado en la memoria con cariño. Eso es lo que buscamos con ELI Family. Crear momentos que no solo enseñen inglés, sino que construyan recuerdos, vínculos y confianza.
En vez de “mamá me obliga a estudiar”, queremos que digan “en casa jugamos a adivinar palabras en inglés”. En vez de “papá no entiende nada de lo que hago en clase”, que digan “le enseñé una canción nueva que aprendí y nos reímos mucho”.
Cuando hay equipo, hay éxito
En ELI llevamos más de 40 años enseñando inglés, y si algo hemos aprendido en este tiempo es que el verdadero éxito llega cuando hay conexión. Entre profesorado, alumnado… y sus familias. Cuando hay confianza, alegría y motivación, el aprendizaje fluye.
Por eso, no nos conformamos con enseñar dentro del aula. Queremos abrir la puerta de nuestras academias a todas esas personas que están en casa y que, muchas veces, no saben muy bien cómo implicarse. Con ELI Family, esa puerta está más abierta que nunca.
Tu papel importa, más de lo que imaginas
Así que ya sabes. Si alguna vez has dudado de si puedes ayudar en el aprendizaje del inglés de tus hijas o hijos, la respuesta es sí. Tu actitud, tus ganas, tu simple presencia ya marcan la diferencia.
No es necesario hacerlo perfecto, ni tener tiempo infinito, ni conocer todas las reglas gramaticales. Lo importante es estar, acompañar, mostrar interés, y sobre todo, compartir.
Porque al final, aprender así en familia no solo es más efectivo… ¡es muchísimo más divertido!
¿Te animas a formar parte de esta aventura? 💙
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